El Promyges Rally Team de Roberto Carranza y Juan Carlos Fernández finalizó ayer su primera participación en el Dakar gracias al buen comportamiento general del buggie, la dilatada experiencia en conducción por dunas y arena, y el temple demostrado etapa a etapa. 5.603 kilómetros, 2.961 cronometrados sobre un 70% de arena y dunas son las cifras de la prueba más exigente, celebrada esta edición en Perú, con poco más de un 50% de vehículos en meta.
Carranza y Fernández tomaron la salida el 6 de enero en Lima, con un Can-Am Maverick en la categoría SxS, a sus espaldas, solo una carrera disputada con este buggie pero con mucha experiencia acumulada por ambos en conducción por dunas y arena a lo largo de su trayectoria.
Las etapas fueron pasando con mucho esfuerzo y con infinidad de averías. Se desconoce exactamente cuántas correas se habrán cambiado -perdieron la cuenta en la correa 20-; se desconoce el número de pinchazos, cambios de presión en los neumáticos, pero “esto es el Dakar”, reconocían en las llegadas embadurnados en fes- fesh.
“Hemos hecho un buen trabajo los dos, hemos disfrutado, ha habido buen ambiente en el coche… Ha sido duro, muy duro… pero estamos muy contentos por todo el apoyo recibido y por haber llegado hasta aquí”, señalaba el vallisoletano. “Nos lo hemos pasado bien, estamos muy satisfechos y desde aquí agradecemos el trabajo de todo el equipo Fn Speed Team, al apoyo de nuestros patrocinadores y sobre todo, a todos los que nos han seguido y han sido partícipes de nuestra aventura”, expresaba Fernández.
El Promyges Rally Team marcó un ritmo cercano al top ten de la categoría SxS en muchas etapas; provocado por alguna avería o el buen criterio de conservar la mecánica llegaron a caer algunos puestos en la clasificación. Pero no importaba, llegar a Lima ya era una victoria.
López Cotardo, ganador de la categoría SxS, empleó casi 34 horas en completar el Dakar. Carranza y Fernández han tardado 64 horas. 22 horas más que, traducido en tiempo de carrera, equivaldría a realizar más de 2 etapas. Solo así se entienden las lágrimas y la emoción al cruzar la línea de meta de la última etapa de este Dakar. Una jornada intrascendente, con poco más de 100 kilómetros de tramo cronometrado, para acercar a los pilotos a Lima y cruzar así el merecido podio de llegada.
Fundidos en un largo abrazo, Roberto Carranza y Juan Carlos Fernández se felicitaron por el objetivo conseguido. “Se nos caen las lágrimas a los dos… La verdad, hacía tiempo que no lloraba, pero creo que merece la pena la emoción de terminar el Dakar. Con la edad que tenemos y el esfuerzo que nos ha costado… Creo que hemos hecho una buena carrera y estoy tremendamente agradecido a todo el mundo por empujarnos hasta aquí”, declaraba muy emocionado Roberto Carranza a los periodistas de TVE igual que Juan Carlos Fernández que confesaba también afectado por el emotivo momento;:“La verdad es que era un sueño, lo hemos cumplido, y no solo hemos corrido el Dakar si no que hemos logrado terminarlo, algo importantísimo para nosotros. Es el culmen que venimos persiguiendo desde hace años y al final, hoy lo hemos conseguido”.
Fuente: El Día de Valladolid